Suba de mínimo no imponible, devolución de impuestos, combustibles fijos por 90 días, suba de AUH, fueron algunas de las medidas que anunció esta mañana el presidente, con un tono y gestos muy distintos a los de la conferencia de prensa del lunes. Entre los anuncios no hubo medidas macroeconómicas, luego de su discurso el dólar y el riesgo país volvieron a aumentar.
El gobierno dispuso una serie de medidas tendientes a mejorar los ingresos de la población más perjudicada por sus políticas económicas, que incluyen desde rebajas y devolución de impuestos, congelamiento de las tarifas de combustibles por 90 y suba de las ayudas sociales, entre otras.
Un aumento del 20% en el mínimo no imponible y en la deducción especial. Esta medida alcanza a 2 millones de personas e implica una mejora de unos 2.000 pesos mensuales.
También habrá una devolución de impuestos ya pagados durante el año de unos 12.000 pesos para una familia tipo (casado con 2 hijos), con un salario bruto de 80.000 pesos mensuales, aunque el cronograma de la devolución será fijado por la AFIP.
El nuevo mínimo no imponible del salario bruto será de 55.376 pesos mensuales para trabajadores solteros y 70.274 pesos mensuales para una familia tipo.
Los trabajadores autónomos recibirán una reducción del 50% en los anticipos que deben pagar el resto del año.
Suspensión de los aportes personales durante septiembre y octubre para los trabajadores en relación de dependencia con salarios brutos menores a 60.000 pesos mensuales, con un tope de 2.000 pesos mensuales.
La medida beneficia a unos 6,5 millones de personas y el Estado absorberá el costo fiscal.
Exención del pago del componente impositivo del monotributo de la cuota de septiembre con un tope de 4.000 pesos mensuales, con el único requisito de pagar en tiempo y en forma.
Para trabajadores informales y desempleados, habrá dos pagos extras de la Asignación Universal por Hijo (AUH) de 1.000 pesos mensuales en septiembre y en octubre.
Esta medida alcanzará a los 2,2 millones de padres y madres con hijos cubiertos por la AUH.
Los empleados de la administración pública nacional, las fuerzas armadas y las fuerzas de seguridad federales (alrededor de 400.000 personas) recibirán a fin de mes un bono de $ 5.000 pesos.
A ello se agregará la suba, por segunda vez en el año, del salario mínimo para unos 2 millones de trabajadores; el porcentaje final será definido por el Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil, del que participan el Estado, los trabajadores y las empresas.
El gobierno dispuso un congelamiento de las tarifas de los combustibles por 90 días.
No hubo medidas de carácter macroeconómico. Entre los anuncios no se mencionó ninguna medida para detener la fuga de capitales, ni control de cambios o medidas para revertir el curso crítico de las variables. Todos los analistas coincidieron en que resultan insuficientes y tardías, ya que nos beneficios anunciados están siendo superados por los aumentos del dólar y las remarcaciones de precios.