Desde hace unas cinco décadas, una escuela técnica bonaerense lleva a cabo investigaciones sobre actividades espaciales. Sus estudios conforman aportes a diferentes emprendimientos que el país desarrolla en la materia. Ahora, dos de sus alumnos podrán viajar a Rusia para continuar su formación.

Se trata de estudiantes de la Escuela Técnica 1 de Magdalena, quienes participaron del Congreso de Actividad Espacial de los Jóvenes en Argentina, que se desarrolló en la Sala Anexo de la Cámara de Diputados y contó con la presencia de importantes instituciones nacionales.

Según contó el director del establecimiento, Ricardo Messina, durante el encuentro los jóvenes expusieron sus avances y proyectos en el campo de la investigación espacial e intercambiaron ideas con diferentes representantes de dicha actividad local y extranjera.

Si bien esta participación ya los llenaba de orgullo, el encuentro les deparó una sorpresa que fue aún más prometedora para la escuela.

Expertos en cohetería

La historia de experiencia espacial, que tiene lugar en la Técnica, se inició en 1970 cuando comenzó la formación de cohetería educativa a cargo de docentes especialistas en la disciplina aeroespacial.

Se trataba de un taller tecnológico que tenía como objetivo introducir a los alumnos en nuevas áreas de investigación científica. Poco después, la comunidad local celebró con asombro el lanzamiento exitoso del primer cohete educativo que alcanzó los 5.000 metros de altura.

La cohetería se convirtió en una nueva actividad educativa interdisciplinaria que articuló con el campo científico tecnológico y técnico específico junto a la física, química y matemática.

Al ritmo de los cambios tecnológicos, en 1990 se sumó a las actividades educativas un joven investigador Pablo De León. Con el apoyo de docentes y vecinos de Magdalena diseñó y fabricó su primer Traje Espacial de Entrenamiento para ser utilizado por astronautas en la NASA en el agua clorada como proyecto tecnológico.

El hecho marcó un hito. A partir de allí, la escuela técnica firmó un Acuerdo de Cooperación Tecnológica con la AATE (Asociación Argentina de Tecnología Espacial) para pequeñas asistencias técnicas. Pero, al mismo tiempo, la escuela comenzó a diseñar, fabricar y lanzar vectores de orden educativos y de pequeña dimensión.

Desde el ciclo lectivo 2017 la Técnica 1 celebró la firma de un acuerdo de cooperación tecnológica con el Instituto Civil de Tecnología Espacial para realizar actividades de divulgación científica propuesta en el Proyecto Institucional y acordadas con el plantel docente de taller para diseñar, fabricar y proyectar actividades de orden espacial. Además, se puso en marcha el Proyecto educativo Pampa Cielo que busca fomentar la divulgación científica y despertar el interés en los jóvenes por la ciencia.

Diciembre de 2018, comenzó para la escuela de Magdalena con muy buenas noticias. El miércoles 5, alumnos y docentes llevaron a cabo el lanzamiento de dos nuevos vectores educativos de diferentes dimensiones y la inauguración de la torre de lanzamiento que será utilizada en futuras pruebas. Esta prueba fue parte de la participación de la escuela en un proyecto Pampa cielo con el Instituto Civil de Tecnología Espacial (ICTE).

Pero, un día después a este significativo acontecimiento, los alumnos de 7° año que participaron en el diseño, fabricación y lanzamiento de los vectores asistieron como oradores invitados por el ICTE en el Congreso Nacional de Jóvenes en la Actividad Espacial en Argentina. En ese lugar contaron sus experiencias y expectativas, ante los 250 asistentes al Congreso en la Cámara de Diputados de la Nación en su anexo 1.

Pero este congreso les tenía deparado un nuevo logro. Entre los oradores se encontraban profesionales del INVAP, El Instituto Balseiro, la CONAE, las universidades UTN de varias regiones y la UNLP. Además, otras empresas y emprendedores como fabricantes de nanotecnología y micro satélites.

Cuando fue el turno de la exposición de la Embajada de Rusia a cargo de su representante del Centro Ruso de Ciencia y Cultura, llegó la sorpresa. Los especialista ofrecieron becas a estudiantes egresados de escuelas técnicas y Universidades para realizar la carrera de ingeniería o maestrías por 6 años en su país totalmente gratuito y abonando un pago de 20 euros para el hospedaje en la villa académica.

Ante esta propuesta los alumnos Tomás Tebaldi y Ezequiel Videla se mostraron interesados y acordaron completar los formularios para proceder al otorgamiento de la becas a concretarse en septiembre de 2019 luego de la evaluación de la solicitud, la cual cuenta con la buena mirada de la embajada por ser esta escuela quien realiza actividades de investigación científica y tecnológica junto al ICTE y la AATE.

Quienes viajen a Rusia podrán estudiar en la Rosatom, una corporación estatal de energía nuclear y uno de los líderes en el mercado nuclear mundial de tecnologías.

Hoy, Rosatom reúne más de 300 empresas y organizaciones, incluida la única flota rompehielos nuclear. Rosatom ocupa el primer lugar en el mundo en tamaño de cartera de proyectos en extranjero (34 plantas en 12 países), cuyo valor es de 133.400 millones de dólares.

La Corporación ocupa el segundo lugar en el mundo en reservas de uranio y el cuarto en términos de su producción. Para la operación exitosa de las instalaciones nucleares en el futuro, Rosatom ya hoy ofrece a los países socios la capacitación de los especialistas.

La Escuela Técnica tiene unos 50 años de historia. Cuenta en la actualidad con una matrícula de 380 alumnos, constituida por el 40 % de mujeres. Los estudiantes egresan con los títulos de Técnico Electromecánico y Técnica Informática Personal y Profesional.

“El hecho de lograr vínculos con diferentes instituciones nos permite a nosotros como escuela seguir desarrollando proyectos. Es un gran logro para la institución el poder abrir más puertas para los alumnos”, explicó Messina.