En vísperas de cumplirse el 37º aniversario del inicio de la Guerra de Malvinas, la Plaza Libertad fue nuevamente escenario de la conmemoración llevada adelante por el excombatiente magdalenense Daniel Alberti. Por primera vez el ritual de recordación formó parte de los actos oficiales por los veteranos y caídos en el Atlántico Sur.

Minutos antes de la medianoche del 1º de abril, vecinos, veteranos de Malvinas, efectivos del Regimiento 8, autoridades municipales y referentes políticos de Magdalena, se reunieron frente al monumento emplazado en la plaza de Villa Garibaldi para acompañar el habitual homenaje a los caídos que desde hace décadas lleva adelante Daniel Alberti, veterano soldado de la Guerra de Malvinas.

Al dar las doce de la noche, el primero en encender una vela frente fue el propio Alberti, en una ceremonia que repite año a año desde hace más de tres décadas. Luego de él, hombres, mujeres y niños se acercaron al pedestal del monumento para sumar sus candelas.

Este ritual personal, que hasta hace pocos años realizaba tan sólo acompañado por su familia y allegados, se ha vuelto una ceremonia cada vez más concurrida. Este año, por decisión de la Intendencia municipal, el acto formó parte de las conmemoraciones oficiales, con la presencia de efectivos y banda musical del Regimiento de Caballería de Tanques 8.

«Soy el excombatiente Daniel Alberti, de Magdalena, que participó en una guerra por la soberanía, por las Malvinas, por el país. Que le tocó hacer un poco de patria, que es un hijo de este pueblo como cualquiera. Me tocó a mí y en esta persona está cada uno de ustedes. Soy uno más de Magdalena, ni mejor ni peor ni distinto. Soy un magdalenense más, que pudo plantar bandera en ese suelo, para hacer historia, para dejar memoria y para que Malvinas también tenga, como dejé hace dos años atrás, junto a Bety y Nahuel, un pedazo de tierra de Magdalena«.

«Mañana Magdalena, en el monumento nuevo, va a tener un pedazo de tierra de Malvinas, que traje pero no para mí sino para todos nosotros. Que nuestro deber sea protegerlo, cuidarlo, porque eso es memoria, memoria del pueblo, es memoria nuestra. Que sirva para las generaciones venideras, para respetar, honrar y no claudicar. Pero sobre todo para tener el sentido de pertenencia a lo que es nuestro. Hubo hombres, jóvenes, como lo fui yo en aquella vez, que dejaron su vida por Malvinas, por su tierra. Para que no sea en vano, solamente tengamos memoria y que la frase que cultivamos los excombatientes se haga más fuerte que nunca Prohibido Olvidar«.

«Hace años atrás había sólo tres velas ahí, hoy son muchas más y son muchas más con un sabor distinto, hay chicos, hay futuro y en el futuro está la memoria, que ellos sean el back-up de nuestra historia. Gracias a todos por acompañarme, para mí hoy es más difícil que el 2 de abril, la víspera me hace sentir y revivir todo en instantes, duele, tengo lágrimas y no me preocupo en ocultarlas, estoy entre amigos, estoy con mi gente y me siento respaldado por todos ustedes. A los que vinieron siempre y a los que vinieron por primera vez: gracias, sólo gracias«, concluyó Alberti ante un cerrado aplauso de los presentes.

Luego, en diálogo con Magdalena Urbana, Daniel Alberti se refirió a las recientes identificaciones de los restos de los combatientes que están en el cementero de Darwin, en Malvinas: «Quedan diez, de doscientos treinta y siete, quedan diez. Cuando fui hace dos años faltaban ciento veintitrés y ahora restan sólo diez. En treinta y siete años el primer paso que se pudo dar fue este. Es recuperar identidad, no hablamos de soberanía, tan solo recuperar la identidad de los que cayeron. Quizás la gente no se da cuenta, pero cuando pisás Malvinas y ves la placa que dice Soldado argentino sólo conocido por Dios, es durísimo. Yo busqué varios compañeros míos y cuando fui encontré uno sólo, ahora están casi todos. No es que se termina el duelo, pero tenés dónde llorar las lágrimas que corresponden. Los viajes que hicieron los familiares en estos tiempos es para decirle adiós a sus hijos en el lugar donde están descansando. Siguen haciendo Patria en Malvinas, que es tierra de gigantes ahora«.