A casi un mes del inicio del curso de guardia del Servicio Penitenciario Bonaerense, másde un 25% de los aspirantes ya habría desertado del curso por distintas razones. Un número importante de los 300, decidió dejar esta convocatoria para emigrar hacia otro tipo de trabajo o directamente no les habría convencido trabajar como guardia cárcel.
Todos sabemos que esta profesión es especial y no todos estamos capacitados mental y psicológicamente para ocupar un puesto de trabajo en una cárcel. Convivir diariamente con personas que cumplen su condena, es en verdad desgastante y no es para cualquiera.
Cabe agregar que con el objetivo de fortalecer la cantidad de personal penitenciario en las cárceles de Magdalena, el pasado 30 de diciembre de 2016, 301 aspirantes a guardias oriundos de esa localidad se presentaron en La Plata para comenzar el curso de guardia del Servicio Penitenciario Bonaerense.
Los futuros agentes, un total de 222 hombres y 79 mujeres, se acercaron al Centro de Capacitación y Reentrenamiento Permanente del Personal Penitenciario, ubicado en la localidad de Lisandro Olmos, para cumplimentar trámites administrativos e iniciar el pasado 9 de enero la carrera penitenciaria.
Las 301 personas integrarán un total de ocho comisiones en una cursada de lunes a viernes que tendrá una duración de casi un año. Los primeros cuatro meses abarcarán diversas temáticas como Derechos Humanos, Técnicas Operativas de Seguridad, Asistencia y Tratamiento, Legislación Institucional, Procedimientos Administrativos, Construcción del Rol Institucional, Defensa Personal y Educación Física, entre otras.
Según fuentes oficiales hasta mayo recibirán conceptos teóricos de lunes a jueves mientras que destinarán los viernes a visitar y conocer establecimientos penitenciarios y asistirán a conferencias brindadas por expertos en la materia.
Los siguientes seis meses los aspirantes realizarán prácticas profesionalizantes en los penales y, una vez finalizado el curso, los guardias del escalafón general, serán destinados a reforzar al personal de las unidades 28, 35, 36 y 51 de Magdalena.
En fin, evidentemente este trabajo no es para cualquiera. Por esa razón muchos de los convocados decidieron, a pesar de ser una fuente laboral importante y que cada guardia cobraría alrededor de los 18 mil pesos, una suma para nada despreciable, dejar este trabajo para darle oportunidad quizás a otros que decidan apostar por trabajar en el Servicio Penitenciario Bonaerense.
