Más allá de todos los preparativos que los turistas realizan para viajar a los principales destinos de la Costa Atlántica, hay una búsqueda fundamental para el conductor: la ubicación de los radares. Este verano habrá 62 equipos para detectar los excesos de velocidad.

Desde hace casi 10 años, las rutas que conducen a los balneario tienen controles de velocidad electrónicos. Fueron instalados por el gobierno provincial tras la adecuación de ley de tránsito. Así se se instalaron cinemómetros (miden en tiempo real la velocidad de un vehículo) en sectores más críticos de las rutas 11, 36 y 215 y también en la Autovía 2 y la autopista que une la Ciudad con La Plata.

A estos controles hay que sumarles los que instalaron los propios municipios. Por ejemplo, en Chascomús hay 8 radares ubicados en los 13 kilómetros de ruta 2 que pasan por la ciudad. Lo mismo hicieron las comuna de Dolores, General Madariaga, Lezama y Mar Chiquita.

Para aquellos que hayan elegido como destino la ciudad de Mar del Plata, serán varios puntos en donde hay cámaras. Son 11 puntos de control entre la Capital Federal y «La Feliz».

Si bien son una clara política de seguridad vial, también representa un buen ingreso para las arcas del Estado, ya que cada infracción detectada por los radares representan multas que van desde los 3.880 hasta los 25.900 pesos. Este último es paro el caso de reincidentes o para violaciones de extrema gravedad.

Más allá de este detalle, la ubicación de las cámaras está señalizada y, generalmente, con buena ubicación como para que cada conductor tenga en cuenta las medidas máximas.

Fuente: Infobae