Funcionarios de alto rango o miembros de su entorno, empresarios allegados al poder, entidades de fútbol y personalidades públicas en la Argentina comenzaron gestiones para crear sociedades offshore y abrir cuentas bancarias en el exterior a través de paraísos fiscales. Tener una sociedad offshore no es ilegal, salvo que se pruebe que está vinculada al lavado de dinero o la evasión.
El estudio de abogados de Juan Pedro Damiani es uno de los principales intermediarios entre los argentinos y Mossack Fonseca & Co de Panamá, una agencia especializada en crear sociedades en paraísos fiscales. En Uruguay existe secreto bancario, lo que convierte a ese país en una escala habitual de las operaciones.
Mossack Fonseca es una empresa especializada en crear de sociedades offshore en paraísos fiscales. Para estas operatorias, suele “prestar” nombres de directores, managers y accionistas, de manera de esconder a los verdaderos dueños de estas “compañías fantasma”. Trabaja para proteger el secreto de sus clientes e intenta evitar gestiones para personas políticamente expuestas, aunque no siempre lo logran.
Sociedades offshore
Son empresas que no registran ninguna actividad económica o comercial y que sirven de pantalla a sus dueños para transferir dinero, realizar operaciones financieras, abrir cuentas bancarias en el exterior y otras operatorias sin las cargas fiscales que tienen los países de origen.
Paraísos Fiscales
Mossack Fonseca (Panamá) y otras agencias de todo el mundo eligen paraísos fiscales como Nevada, Seychelles, Islas Vírgenes y Bahamas para registrar las sociedades. Allí gozan de un estricto secreto bancario y protección de datos personales.